Hace poco fui a la nueva muestra del Museo de la Moda de Santiago, “Los 80’s”. Donde a través de una interesante puesta en escena se exhiben una variada serie de elementos que intentan plasmar el espíritu de esos años. Y bien lo lograron.
Los ’80 fueron años imborrables, influenciados por hechos históricos que se encargaron de darles un carácter único. Cambios políticos, efervescencia social y, por supuesto profundas crisis que hicieron de esta década un periodo lleno de contradicciones, excesos, contrastes, incertidumbre frente al futuro, extravagancia, individualismo, y códigos estéticos que nos hicieron cuestionarnos los conceptos de arte, moda y belleza. 
A medida de avanzaba por los pasillos rodeada de colores flúor, hombreras, chasquillas con laca y abundancia en general; me daba cuenta que a pesar del paso de los años, los ’80 seguían presentes en nosotros. Y no me refiero a la nostalgia que me dio al ver mi Barbie gimnasta en su caja, o los muros de VHS; sino a la fuerte influencia que esta época ejerce actualmente en las principales formas de expresión: moda, artes plásticas y música.Era como si cada vestido, cada accesorio, textura y color estuviera citando a una colección reciente. Como si estuviéramos viviendo un constante revival.
Cuando veía juegos geométricos en blanco y negro solo veía a Helmut Lang , Prabal Gurung y Givenchy. Con las variaciones de volúmenes, no podía dejar de pensar en las últimas colecciones de Giambatista Valli, Burberry Prosum e incluso Viktor & Rolf.
Las intensas mezclas de color me traían de inmediato a Balenciaga, Moschinno, y por supuesto Alexander McQueen. Y con la agresividad y Glam del punk rock, sin duda Gareth Pugh y Balmain.Pareciera que todos hubieran decidido rescatar una y otra vez los aciertos y desaciertos de ese entonces. Exprimiendo cada una de las diversas opciones que ofrecieron aquellos años… Dándole por supuesto un toque actual para ganarse el carácter de reinventado.
Creo que será imposible deshacernos de los días en que Madonna cantaba Material Girl cambiando el encaje negro por joyas de brillante. Cuando Boy George rompía los tabúes respecto al Sida y al mismo tiempo Duran Durán bailaba la coreografía de Wild Boys que perfectamente hoy podría pertenecer a Lady Gaga.
Por mucho que los critiquemos, que tratemos de bloquear los días en que fuimos víctimas de sus tendencias y que no queramos asumir que en el fondo nos gustaron y todavía nos gustan, no podemos dejar de reconocer que han sido los 10 años más nutritivos en cuanto a estilos y corrientes. Y que lo más probable es que sigan inspirando en el futuro… Jorge Gonzalez tenía toda la razón…
En plena edad del plástico
seremos fuerza, seremos cambio
no te conformes con mirar
en los '80 tu rol es estelar
tienes la fuerza eres actor principal
de las entrañas de nuestras ciudades
surge la piel que vestirá al mundo
ya viene la fuerza la voz de los '80
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